Entre líneas
El hecho estético es también político, ya sea desde su lado más filosófico o desde su aplicación más práctica en la sociedad. Toda manifestación cultural es así una expresión de su época, siendo por tanto una idea o una documentación de carácter político. Probablemente, la forma expresiva más política de todas, es la fotografía, pues su creación tiene un fuerte impacto social, y su materialización se inserta en el imaginario colectivo. Sin embargo, la fotografía no siempre tiene que estar vinculada a proyectos documentales o al reportaje gráfico para enmarcarse en lo político. Y es a este nivel donde se instala “Interrupciones”, proyecto individual de Mariano Zuzunaga que conmemora los 50 años de su primera exposición, realizada en 1972 e inspirada en la obra del reconocido artista Alexander Calder (USA, 1898-1976).
“Interrupciones” plantea una reflexión muy personal en torno al acto fotográfico, analizando conceptos clásicos como el espacio y el tiempo, y re-pensando el rol del fotógrafo hacia una dimensión más filosófica de la estética de la imagen. Zuzunaga recorre lugares anónimos y los traslada a la imagen fotográfica, no sin antes dotarlos de cierto aura, que solo el ojo del fotógrafo es capaz de lograr. Son lugares que empiezan a adoptar formas, figurativas o abstractas, y que dejan de ser lo que son para convertirse en imágenes cargadas de simbolismo.
Con una representación que se acerca a la naturaleza muerta, las imágenes de Zuzunaga son un fiel pero sutil documento de un tiempo, de un manifiesto, de una utopía. Fueron concebidas con simpleza, dignidad y austeridad de recursos, pero impregnadas de un impronta conceptual que atraviesa los límites del arte. Detenidas en el tiempo y con nobleza, las fotografías de “Interrupciones” llevan consigo 5 décadas de vida fotográfica, develando una mirada que interpreta historias humanas, cotidianas y reales. Y es que si las quimeras políticas quedan plasmadas en los libros de historia, el arte se encarga de revelarlas en otro horizonte. Cada escena fotografiada por Zuzunaga; sea una sombra en la pista, un escarabajo sobre la página de un libro, o un perro caminando por una playa del norte del Perú; prevalecerá a través del tiempo, y entre líneas, con la agudeza que lo caracteriza, nos contará algo más, algo que cada quien tendrá que descifrar.
Carlos Caamaño A.